23 octubre 2011

El negocio de la gipe A

Se pronostico que nos afectaría la primera pandemia del Siglo XXI, pero al final se quedó en nada. Los Gobiernos de medio mundo se gastaron cantidades de dinero en vacunas para la gripe A, vacunas que nunca llegaron a utilizarse. Nos preguntamos, ¿la Organización Mundial de la Salud (OMS) infundio el temor entre la población para beneficiar a algunas empresas farmacéuticas?.

La suiza Novartis elaboraron alrededor de 170 millones de dosis de la vacuna, y la británica GlaxoSmithKline (GSK), de otros 291 millones, cuyo precio de la vacuna en Estados Unidos y Europa estará entre los 10 y los 15 dólares.
En España, apenas han fallecido 272 personas, ni siquiera un 10% de las que suele producir la gripe normal cada año. Si tan mortal era el virus H1N1, la gripe A, y la mayoría de la población no se vacunó, no se entiende que el número de muertos no llegase ni a los 300, tal vez nos han tomado el pelo, empezando por la OMS y los laboratorios".


La Organización Mundial de la Salud alertó de la posible muerte de unos 150 millones de personas, pronosticando que ocurriría la mayor pandemia de la historia reciente. Esto causo una enorme preocupación y llevo a los gobiernos, como por ejemplo en el caso español, que inclusive recomendaron medidas drásticas, como no besarse, evitar el contacto cercano, lavarse las manos con frecuencia etc. y a adquirir cantidades masivas de vacunas contra la gripe. Esta compra masiva tuvo unos claros beneficiarios: las compañías farmacéuticas.
España se compraron más de 37 millones de dosis, lo que supuso un gasto en vacunas para la supuesta pandemia de 333 millones de euros. Las compañías farmacéuticas ganaron enormes sumas de dinero.


Ahora, una vez pasado el temporal muchos culpan a la OMS de haber exagerado la gravedad de la enfermedad para beneficiar a las farmacéutica, sin embargo la organización siempre ha negado estas acusaciones.
Lo cierto es que ha provocado una pérdida de credibilidad de la OMS, un beneficio económico para las compañías farmacéuticas y un gasto de las arcas públicas de todos los países.
Los eurodiputados critican en el informe aprobado el gasto de miles de millones de euros para adquirir vacunas contra la cepa H1N1 que provocó la muerte de 2.900 personas en abril de 2010, frente a las 40.000 atribuidas a la gripe estacionaria y han reclamado una mayor colaboración entre los estados miembros para aumentar la eficacia de planes de prevención de pandemias futuras. También han pedido a la Organización Mundial de la Salud (OMS) que revise su concepción de pandemia, teniendo en cuenta su gravedad y no sólo la extensión geográfica en el futuro.


A fin de combatir futuros intereses de conflicto, el pleno del Parlamento Europeo ha reclamado introducir una definición común de todo conflicto de intereses y que se conozcan las declaraciones de intereses de las autoridades de salud públicas europeas y grupos asesores, teniendo en cuenta que son los fabricantes y no los estados miembros los que tienen la primera responsabilidad de certificar la calidad, seguridad y eficacia de medicamentos concretos, según la normativa europea. En este sentido, los eurodiputados también reclaman crear un Código Europeo de Conducta para controlar la función de los expertos científicos que asesoran a los organismos públicos europeos, y que se excluya en última instancia a expertos del sector farmacéuticos en las decisiones finales de compra.