21 agosto 2011

¡Se me olvido la contraseña!



Actualmente son muy pocos las personas que no utilizan una contraseña en su quehacer diario, el problema se presenta cuando tiene varias contraseñas y un momento no logras recordar cual debes utilizar, para colmo de desgracias después de tres intentos se bloquea tu acceso al ordenador o  móvil.
Que es una contraseña o clave (en ingles password) es una forma de autentificación que utiliza información secreta para controlar el acceso hacia algún recurso. Por norma la contraseña debe mantenerse en secreto ante aquellos a quien no se les permite el acceso.
El uso de contraseñas se remonta a la antigüedad: los centinelas que vigilaban una posición solicitaban el «santo y seña» al que quisiera pasar. Solamente le permiten el acceso a aquella persona que conoce la seña. En la era tecnológica, las contraseñas son usadas comúnmente para controlar el acceso a sistemas operativos de computadoras protegidas, móviles, WiFi, decodificadores de TV por cable, cajeros de bancos. Un típico ordenador puede hacer uso de contraseñas para diferentes propósitos, incluyendo conexiones a cuentas de usuario, accediendo al correo electrónico (e-mail) de los servidores, accediendo a bases de datos, redes, y páginas Web, e incluso para leer noticias en los periódicos (diarios) electrónicos.
En la lengua inglesa se tienen dos denominaciones distintivas para las contraseñas: password (palabra de acceso) y pass code (código de acceso), donde la primera no implica necesariamente usar alguna palabra existente (sin embargo, es normal emplear alguna palabra familiar o de fácil memorización por parte del usuario), la primera suele asociarse también al uso de códigos alfanuméricos (también llamado PIT - Personal Identification Text), mientras que la segunda frecuentemente se liga a la utilización de algún código numérico (asimismo llamado PIN - Personal Identification Number). Esto ocurre igualmente en el habla española, ya que en ocasiones clave y contraseña se usan indistintamente.
El mundo moderno nos ha obligado a tener muchas contraseñas, provocando que en algunos momentos dudemos cuál es la que debemos utilizar. Como por normas de seguridad nos tenemos que memorizar una combinación de números y letras para hacer que la contraseñas sea más segura. Según los expertos una buena contraseña no debe tener menor de 8 caracteres, aunque lo ideal sería de 12 a 15 caracteres que deberían ser una combinación de números y letras y además que tenga caracteres de fecha de nacimiento, DNI o cualquier dato personal, dificultándose su memorización.
Ahora imagínese que le ocurre a una persona normal en su vida diaria. Generalmente tiene una contraseña para las dos tarjetas bancarias que por suerte son de 4 caracteres, también tiene dos para acceder a internet a sus bancos y si utiliza su libreta de ahorros debe tener sus contraseña. En el trabajo tiene una para entrar a Windows y una para cada programa que utiliza y para rematar la faena debe cambiarla cada mes. Debemos recordar bien nuestras contraseñas y no debemos escribirlas para evitar que caigan en manos inescrupulosas. Se no estamos atentos en el momento de marcar muestras contraseñas podemos bloquear nuestro acceso y entonces la cosa se torna cuesta arriba si quiere arreglarla, porque debes comunicarte por teléfono al informático para activarla sin antes debemos ser sometidos a un interrogado excautivo para comprobar que somos el usuario y no un impostor.

Al parecer tanta seguridad nos abruma, y además según expertos en informática no existe contraseña infalible a los hackers, porque disponen de programas capaces de descifran cualquier contraseña, solo es cuestión de tiempo y lo comprobamos cuando te enterar que entraron a tal ordenador muy seguro de tal empresa o gobierno.